Los Placeres Ocultos

Los Placeres Ocultos
[Hidden Pleasures]

Drama. España. 1976. 95 min.
Director: Eloy de la Iglesia.
Intérpretes: Simón Andreu, Charo López, Tony Fuentes, Germán Cobos.

Se trata de la primera película española de tema explícitamente gay. Eduardo es el director de un banco que no duda nunca en utilizar su posición para conseguir a jovencitos con los que mantiene relaciones. Pero un día se enamora de un pobre estudiante hetero llamado Miguel. Miguel rechaza a Eduardo desde el punto de vista sexual, pero mantiene con él una grata amistad, a la que se une la propia novia de Miguel (Charo López). Juntos formarán un triángulo a modo de familia, en el que Eduardo ve aceptada su homosexualidad, aunque para ello debe renunciar a su vida sexual.












Review
From acclaimed director Eloy de la Iglesia comes a look at cross-generational love. When a successful banker falls for Miguel, the man manages to get himself involved in the older teen's life through a series of manipulative moves. The boy is thankful for his new job, motorcycle, etcetera but once he realizes the gifts were an attempt to get inside his pants, the friendship is brought to a halt, that is until some "fag-bashers" rob the banker and Miguel realizes that he cares. The two then agree to a Platonic, father/son-like relationship, which proves beneficial to all involved. Local gossip and prejudice make it a bit hard to maintain, though. Intelligent; insightful; recommended!
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Eloy de la Iglesia
El director que mejor retrató la marginalidad y la delincuencia de los años ochenta, Eloy de la Iglesia, ha muerto a los 62 años tras someterse a una operación para extirparle un tumor maligno de riñón. Con su muerte, se pierde a uno de los pocos directores comprometidos con la realidad de su tiempo y que desafió la censura franquista.

Natural de Zarautz (Guipúzcoa), Eloy de la Iglesia deja un patrimonio de 22 películas, entre las que destacan títulos como “El Pico”, “Navajeros” y “La estanquera de Vallecas”, además de decenas de producciones para televisión.

De la Iglesia debutó en el cine con 'Fantasía... 3' (1966), a laque siguieron títulos como 'Cuadrilátero' (1970) y 'La Semana del Asesino' (1971), pero no es hasta seis años más tarde con 'La criatura', protagonizada por Ana Belén, cuando su nombre comienza a ser más conocido por el público.

Considerado como uno de los directores más representativos y comprometidos de la transición, fue militante del PCE y es a su vez guionista de la mayoría de sus películas. De esta etapa destacan 'Los placeres ocultos' (1977), 'El diputado' (1978) y 'El sacerdote' (1979), pero es a partir de 'Navajeros' (1980), película con banda sonora de Burning, cuando comienza a conectar con el público más joven que llenaba los cines de barrio.

La marginación y la homosexualidad

Aquí comienza una temática, en la que Eloy de la Iglesia explora la marginación social y se acerca al mundo de la delincuencia urbana e, incluso, la homosexualidad, un tema tabú hasta entonces en las salas de cine españolas. Son célebres 'Colegas' (1980), sus dos entregas de 'El Pico' (1983 y 1984), 'Otra vuelta de tuerca'(1985) y 'La estanquera de Vallecas' (1986).

Durante 12 años estuvo apartado del cine. Sus problemas con las drogas le llevaron a alejarse de las historias y de la cámara. Según decía, "no es que la industria me diera de lado. Desde luego, no tenía llamadas ni telegramas con propuestas, pero lo cierto es que no me rechazaron nada porque yo no ofrecí nada".

En esta etapa continuó detrás de las cámaras para conducir distintos proyectos televisivos, como la adaptación del 'Calígula' de Mario Camús.
Su regreso a la gran pantalla
En 2002 volvió con 'Los novios búlgaros', su última producción. Una película "muy relacionada con un momento concreto de mi vida, en el que ya los años pesan y los recuerdos duelen. Mis otras películas eran totalmente cerradas, quería contar algo y solo eso. Ahora he perdido ese temor, esta es más abierta y me apetece que el espectador se la tome como quiera", explicaba el director.
Con ella abordó de nuevo la homosexualidad, "sin el lastre del franquismo y la censura" para abordar el tema.
Desde que en 1996 el Festival de Cine de San Sebastián le dedicara una retrospectiva a Eloy de la Iglesia, le llovieron los homenajes y reconocimientos.